
El ritmo circadiano a menudo se conoce como nuestro "reloj corporal" interno.
Es solo un ciclo de 24 horas que ayuda a regular nuestros procesos físicos, mentales y de comportamiento. Este reloj corporal nos dice cuándo dormir, despertar, comer y digerir alimentos, liberar ciertas hormonas e incluso regular la temperatura corporal central.
La mayoría de las investigaciones sobre el ritmo circadiano giran en torno a su papel en el sueño. El sueño es vital para restaurar la energía y consolidar la información y los recuerdos aprendidos del día. Juega un papel importante en la función inmune y el rendimiento mental.
Un papel importante y a menudo pasado por alto del sueño y un ritmo circadiano bien alineado es el control de peso. Los ritmos circadianos desalineados ocurren cuando el ritmo de nuestro cuerpo no está sincronizado con nuestro entorno, los demás y nuestros procesos internos. Puede conducir a elecciones de alimentos pobres y una variación diurna en el metabolismo energético, como un vaciado gástrico lento, intolerancia a la glucosa y aumento de la resistencia a la insulina, todo lo cual puede conducir a un aumento de peso a largo plazo.
- Objetivo de 7-9 horas de sueño cada noche
- Restablece el reloj de tu cuerpo con la exposición a la luz natural; acampar ha demostrado ser una excelente manera de alinear su ritmo circadiano, ya que nos obliga a despertar con el sol y al viento con la luna
- Si trabaja por turnos o le resulta difícil conciliar el sueño: asegúrese de no tener demasiado calor ni frío; bloquea la luz siempre que sea posible; solo use su habitación para intimidad y sueño; evite el alcohol y la cafeína por la noche.
- Si está en cama por más de 20 minutos y no puede dormir, levántese, muévase suavemente o lea y luego regrese a la cama cuando tenga sueño.
- Dúchese antes de acostarse: el cambio en la temperatura de su cuerpo puede provocar somnolencia
- Evita los bocadillos tarde en la noche. Intente agregar un bocadillo por la tarde para minimizar los antojos nocturnos